lunes, 28 de noviembre de 2016

Ofertón de mansedumbre al 2x1… Por: Eduardo Rodríguez Diez.



Estimados amigos, al mismísimo son del dos por uno, cual mercado sobre-ruedas a punto de cerrar, se dieron este sábado y domingo la corrida número tres y cuatro respectivamente del serial mayor en la Plaza México; dos corridas que resultaron un ofertón al escaso público asistente, pero de mansedumbre y aburrimiento…

En la tercer tarde; el sábado, 25 se lidió una señora corrida de toros de José Julián Llaguno del encaste Jandilla que pasta en sus dehesas; la cual no tuvo un pase; y los dos toros que mostraron un poquito de clase en su embestida y que pudieron caminar un poco más, se apagaron pronto y el gozo al pozo; y es que insisto no es lo mismo profesionalizar nuestra fiesta que españolizarla. Los tres toreros, Saldivar, Llaguno y Marín se quedaron con las ganas de poder mostrar su toreo, pero ante lo que salió por la puerta de toriles; ni el que inventó el toreo podía hacer algo digno de señalarse y los propietarios de este hierro deberán muy seriamente reconsiderar el volver a sus orígenes que vaya que lo tienen en su casa ganadera y no andar con experimentos como el que se vivió el pasado sábado que seguramente les dejó un amargo sabor de boca; o definitivamente si pretenden “refrescar” su sangre que lo hagan con ganaderías que si embisten como la Victorino Martín y no con un encaste al que le está sucediendo lo mismo que a la ganadería brava mexicana que al buscar el toro “artista” ha dejado de lado la esencia del mismo que es la bravura.

Y el domingo no cambió mucho la cosa con los de El Vergel, que si no hubiesen caído en las manos del extraordinario torero potosino Fermín Rivera y de Sergio Flores, estaríamos hablando de otro petardo ganadero. El torero español que confirmo la alternativa José Garrido, estaba más preocupado en no perder el peinado que en otra cosa; si, con la clásica escuela que tienen todos los hispanos que llegan por acá, pero sin nada extraordinario que decirnos.

Los que si volvieron a decir y volvieron a levantar la mano, dando un golpe fuerte en la mesa y diciendo aquí estamos; merecemos más y mejores oportunidades, sobre todo empezar a medirnos ya ante las figuras españolas, son Fermín Rivera y Sergio Flores.

Hemos dicho muchas cosas de Fermín y hoy no queda más que decir; está hecho y convertido en un señor torero, punto, no hay más. Ayer cortó un apéndice más que merecido después de que a base de consentir y sobar a su segundo, lo metiera en el engaño para extraerle muletazos de extraordinaria manufactura. Fermín tiene una muleta poderosa, un toreo sobrio y un valor sereno, es el clásico torero al que las figuras le tienen más miedo que al toro. ¿Será por esto que no quieren alternar con él?

Flores, viene en cada tarde convencido de querer ser figura del toreo; ayer ante el de mas movilidad de El Vergel, al que sometió a su muleta con bonitos doblones, estructuró una faena de alta calidad con ambas manos que fue culminada con una entera para recibir dos orejas que fueron protestadas; para mi gusto una hubiese sido suficiente y el público no hubiese protestado esa segunda oreja que a final de cuentas, el chaval tlaxcalteca paseó con alegría acompañado de tres chavalillos en el albero.

Sin duda alguna estos dos toreros incomodan a sus alternantes por la verdad y el pundonor con el que enfrentan sus compromisos.

Fermín esta puesto y estoy cierto que sería un torero que gustaría en España por la sobriedad con la que interpreta su toreo; un torero al que nos falta verlo con un torero verdaderamente bravo para poder disfrutar a plenitud de esa expresión de clase y de buen torero.

La empresa sigue sin darle al punto clave para atraer a la plaza no solo a los amigos del hijo de Xavier Sordo. El dos x uno copiado de Soriana y de Don Julio de la Comer, no funcionó y seguramente saldrán los defensores del sistema a decir que la empresa ya cumplió y que está haciendo todo lo que está a su alcance y su máximo esfuerzo para dar toros, que ahora nos toca a los aficionados no ser malagradecidos y apoyarla.

Aquí la respuesta de un señor que lleva yendo más de 60 años a esa plaza y que al salir de la misma el día de ayer me comentaba: “¿Que espera esta empresa? ¿Qué quiere? ¿Que después de más de veinte años que hemos sido engañados, robados y timados ahora respondamos? -¡Coño!...Un solo boleto de mi derecho de apartado me cuesta $470.00, -$470,000.00 de los viejos pesos- con eso voy yo y llevo además a mis dos nietos a una sala VIP de CINEMEX en donde voy a pasar dos horas y media, viendo una película, no sentado, sino acostado, en un sillón comodísimo en donde además apretando un botón me atiende un caballero o una señorita a la que le puedo pedir de beber o de comer y que si tengo frío hasta una cobijita me prestan…Aquí en la que dicen la plaza más grande e incómoda del mundo tengo que estar sorteando, a decenas de cabrones, haciéndome a un lado para que no me caigan encima con las alegrías o las papas y para que no me pisen los juanetes, sentado incómodamente en mi propio lugar; ¡Joder!... ¿Qué esto de verdad no lo ve la empresa? ¿No ve o no quiere ver que lo que se paga por un boleto en los toros, no es ni por mucho lo que se recibe en otro tipo de espectáculos? En fin chaval como siga esto así, la que sigue en ser demolida es la plaza, ya van por estadio, a ver cuánto tiempo más aguanta la setentona...”

Y tristemente este aficionado tiene toda la razón del mundo; siempre he señalado que el espectáculo taurino ha sido elitista y se ha alejado de su origen humilde que es el pueblo; y mientras más se siga alejando la misma de lo que le dio origen; más estará próxima a desaparecer. Esperemos que esto nunca suceda o que por lo menos a nosotros no nos toque verlo; que esa gran visión que como empresario tiene Don Alberto Bailleres empiece a aplicarla en la fiesta de los toros; el beneficio de la duda con la que empezó esta nueva administración está llegando a su fin, necesitan una REINGENIERA de la fiesta y del espectáculo que la misma provee.

Un abrazo y suerte para todos…

Porra México A.C.
Eduardo Rodríguez Diez
Presidente
“El toreo es el único arte fugaz que impacta de un solo golpe todos tus sentidos y el único capaz también de llegarte con una sola imagen a lo más profundo de tu corazón”
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