Tarde de presentaciones...
Tarde de ilusión...
Siempre he dicho que la fiesta es de TOROS(o novillos en este caso) y si no hay emoción en los ruedos, ésto acaba siendo más aburrido que un juego de ajedrez o que la transmisión por radio de un torneo de golf...
Ayer hubo emoción..
Ayer el rey de la fiesta volvió a ser protagonista...
Ayer la ganadería de San Constantino ha dado un palo y fuerte...
Unos más y otros menos, pero los seis novillos, tuvieron pases...
Los cuatro primeros de consagración y quinto y sexto, sin ser del otro mundo, tenían faena...
San Constantino llegó a la San Marcos y la tomó por asalto...
Sorprendió, gustó y emocionó...
Todos hermosos de hechuras, mismas que no mintieron a la hora de meter la cara...
Y cuándo sale el toro bueno, los de luces que no sirven, son desnudados, sin miscericordia y los mandan a su casa en tres pases...
A diferencia de los que tienen maneras y ganas de ser...
A esos el toro bueno los puede encumbrar...
El primer pupilo de Juan Pablo Corona, de nombre Constantino, tuvo todas las virtudes de un toro bravo...
Siempre humillado, con fijeza, con nobleza y con bravura...
Iba y venía como un bendito, pero la basca hispana de apellidos Ruiz Muñoz, ni lo entendió, ni lo vió y mucho menos lo toreó...
Trapazos, dudas, más trapazos y el de San Constantino, se fue al destazadero inédito...
Novillo de rabo que a los ciegos del palco, se les pasó de noche..
El cuarto, nuevamente evidenció al español, que corrió cómo liebre en cacería...
Otro novillo desperdiciado por el recomendado...
Había mucho interés por ver al rubio José Miguel Arellano y tengo que decir, que sin estar inconmensurable, si dejó muestras y destellos a rescatar...
Tipo de torero, todo...
Valor, suficiente y un poco más...
Detalles de calidad, muchos...
Qué está verde sin duda...
Pero dan ganas de volver a verlo...
Con el primero de su lote que fue bueno, a ratos estuvo y bastante bien, pero tiene un gravísimo defecto...
No carga la suerte, todo lo contrario...
Se descoloca y siempre queda, no sólo en la pala del pitón, casi a medio costillar y así no se puede...
Pero bueno, tiene maneras y habrá que esperar...
El quinto de la función, no fácil, exhibió su verdor y reitero, mucho que corregir, pero ganas de volver a verle...
Juan Pedro Herrera fue un torbellino...
Intentó todo, quiso todo y lo dió todo...
Se puso y los astados lo quitaron...
Lo volvió a intentar y mismo resultado...
Pero el chaval ni se miró la ropa...
Se leventaba cómo si nada y lo volvía a intentar...
A veces le salía el show, otras no...
Pero reventó la plaza y eso es de llamar la atención...
Tiene carisma, tiene inventiva, tiene frescura...
Pero algo que me llamó la atención fue, que dentro de todo ese maremágnum de emociones, cuando se relajó, pegó muletazos realmente buenos...
Fue su debút y el camino es más largo que la cuaresma, pero habrá que esperar...
También necesitamos locos en el escalafón...
Pero reiterando, todo éste cúmulo de emociones, no hubieran sido posibles, si el REY DE LA FIESTA, no pone su parte...
Gran novillada que retiró a un hispano que no sirve, dejó ver las buenas maneras de Arellano y dejó que Herrera se diera gusto con sus locuras y buen toreo...
Ahí hay una ganadería con buen simiente y que si no cae en el juego de los figurines, puede dar mucho de que hablar...
Fernando Lahoz
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