Tres novilladas desgraciadamente no pude escribir más que de tedio y de falta de ambición de los chavales...
Muy, pero muy poco bueno se pudo relatar de los festejos anteriores...
Quizá lo de Héctor Gabriel, algún detalle aislado de Javier Castro y alguito del tapatío Alejandro Fernández...
Lo demás, apatía, aburrimiento y desgano...
Hoy en los tres primeros astados, la cosa no mejoraba y todo indicaba que me volvería a casa con un palmo de narices y con el enfado de decir, "éstos no quieren ser"...
Rodolfo Mejía "El Tuco" a peor..
Sin plan, sin estructura, sin la más mínima idea de terrenos y colocación..
El creyó que estuvo sensacional y se regaló una vuelta muy protestada...
En segundo lugar actuó el capitalino, Arturo Soto que si bien, se vió con voluntad, sus formas no dijeron mucho..
Y es que Soto cómo varios de sus compañeros han agarrado una terrible manía de torear hacia afuera y pasarse a los novillos lo más lejos posible...
Y claro eso no emociona...
Pero lo peor de la tarde vendría en el tercero de la función..
Un español Pepe Vargas, con ya mucho rodaje en ésto y recomendado, no se por quién, ha dado la nota...
No se quedó quieto en ningún momento, después de no se cuantos años, no tiene ni idea de cómo coger un capote, le dió cuarenta mil vueltas al novillo y mientras más avanzaba el trasteo, se ponía más pálido que una hoja de papel bond...
Sainete con la espada y lo peor, que la gente ni lo peló al retirarse a la barrera..
En fin, tres novillos y no pasaba nada..
Pan con lo mismo...
Cero anhelo por parte de los chavales...
Pero oh sorpresa!!
Brincó al ruedo el cuarto de Pastejé y un niño resuelto de nombre Mariano y apellido Sescosse, le zumbó cuatro verónicas de verdad y una media muy sevillana...
Cómo que cuándo vi eso, el corazón me volvió a palpitar y dije a ver, a ver...
Y bueno, con la muleta, me acabó de gustar el zacatecano...
Sobrio, con clase, con valor y sobretodo, con cabeza..
El novillo no valía nada, pero Mariano ha estado tan firme y tan solvente, que lo hizo ver mucho mejor de lo que merecía el de Pastejé..
Una pena que fallara con la espada..
Y todavía con la miel en los labios, otro chaval, fijó mi atención de grata manera..
Su nombre Iván Hernández..
Ya en el duelo de quites con Sescosse le vi buen gusto, sobretodo en un remate a una mano, pero cómo soy medio incrédulo, dije, bueno, fue sólo un quite...
Pero no, porque el chavea tomó la muleta y a dejado pasajes realmente buenos e interesantes, ante un novillo sin fondo ni bravura, pero que tenía teclas que tocarle...
Se puso en el sitio y aunque a ratos acusó el verdor normal, no se rajó, al contrario, demostró valor seco, de ese del bueno...
Pinchazo y estocada entera para cortar una merecida oreja...
Cerró plaza José Fernando Sandoval, que está más verde que una lechuga, pero si me dicen que me acuerde de un detalle, está dificil..
Pasó de puntitas en su presentación...
Y cómo es la cosa, con la novillada más complicada en lo que va del serial, dos niños levantaron la mano, para decir, quiero ser torero!!
Y no necesitaron de faroles, pirotécnia y parafernalia barata..
Ni tuvieron que pararse de cabeza o colgarse de las tablas para demostrar sus ganas..
No.
Simplemente, estuvieron en eso, en toreros..
Serios, andando bien delante de los novillos, con gusto, con valor sereno y con detalles de calidad...
Ojo con Mariano e Iván, que dijeron, cuándo se quiere, a pesar de todo, si se puede...
Fernando Lahoz
