Acabaron por reventar a algunos, a cientos más, seguir defendiendo lo indefendible y atacando a los "amargados" y a varios pedir prudencia, consenso y "buenas" ideas para salvar la tan maltratada fiesta mexicana...
Ideas?
Propuestas?
Qué eso no debería nacer de las empresas y de sus colaboradores?
O ahora los que escribimos, los aficionados y demás, tenemos que decirles cómo hacer las cosas...
Pero bueno, si quieren que les platique lo que yo escucho, leo y comento, con muchos y buenos aficionados, ahí les va....
El aficionado, el público, se siente relegado....
Y quiero aclarar, qué este artículo va por lo que pasa en la grandota de Insurgentes...
Porqué?
Porque la setentona ha sido creadora de ídolos, por sus pasillos han pasado los mejores, los peores, los de medio pelo...
Pero a final de cuentas, esos ídolos o locos que brincaban del gran ruedo capitalino, llenaban las plazas de provincia, los empresarios del interior contaban con nombres y hombres....
Pero cuál era esa gran fórmula?
Cómo se hacían ídolos?
Porqué la gente se volcaba en la taquillas?
Simple...
Repite a los tiunfadores....
Dale a la gente lo que quiere ver...
No les des escoger entre carteles ya programados, porque eligirán dos....
Pero y si se crea esa necesidad de idolatría nuevamente...
Porque el aficionado al toro vive de deidades, de modelos, de adoración al hombre que se viste de luces...
Pero si un día triunfa y lo tienes que ver, uno o dos o quizá tres años después, nadie se arrodilla...
Se olvida...
Que hubiera pasado si Mejía, Belmont y Arellano, estuvieran en éste tiempo?
O Murillo, Ferrigno, Ondarza, Del Olivar?
O Pastor y El Pana?
O Gutiérrez y Majano?
O aquella camada de Pizarro, Manzur, Luevano, El Conde, Talín, Montaño, Rentería, Flores, Mora, Tomás, Ochoa, Mario del Olmo?
Y me puedo seguir con más nombres..
Porqué se llenaba la plaza?
Primero, porque la gente los conocía...
Manolo Sánchez, De Granada, El Geno, Enrique Garza y le sigo...
Su fórmula ya no sirve...
O creamos ídolos, héroes vestidos de luces o ésto se va al caño...
El Glison habrá sido lo que sea, pero junto a él brincaron toreros extraordinarios...
Me vale madre si un torero enmascarado llene las plazas, pero hagan algo chingada madre!
Fernando lahoz