jueves, 7 de julio de 2016

NO SOLO ATROPELLA LA RAZÓN, ÉSTE ATROPELLA TODO.. Apunte de la primera de la feria de Pamplona...



Lo de Roca Rey, va más allá de toda lógica...
Mi abuelo me explicó, que existían terrenos del toro, que el torero tenía que estar en un sitio específico, que las distancias, que los toques..
El famoso ocho que tiene que describir el astado ante el inflexible tronco de un hombre vestido de luces...
"Hay que poder con los toros"...
"Hay que sacar el fondo bueno, que la mayoría de los astados tienen"...
"No pudo, no quiso"..
"Quiere, pero no puede"...
"Puede, pero no quiere"...
Frases que se leen en muchas crónicas diarias...
Pues el peruano Roca Rey:
Puede con los toros, saca lo bueno de lo que tiene enfrente, quiere y hace lo que le da la gana...
Ayer en Pamplona realizó dos faenas diferentes...
Al malo, lo sometió..
Y al bueno lo bordó....

Yo que soy tan agrio y tan amargo en mis comentarios, no puedo más que reconocer a un niño de 18 años, que se pone cómo Andrés...

Pero también tengo que decir, que ésto no es normal...

El chaval atropella la razón, mata técnicas, terrenos y le importa un carajo el vivir...
Roca Rey está inventando algo...

Éste no da un paso atrás...
Éste no se deja nada en el ruedo..
Éste, se siente cómodo con el bueno y con el malo...
Éste, atropella todo lo que se le ponga delante....

No es el más fino, no es el de más clase, pero tiene dos cosas, que no tienen los demás...

Una cabeza privilegiada y dos cubos entre las piernas..

Pero los tocados por la mano de Dios, no son perfectos..

Andrés le está faltando el respeto a los toros...
El peruano, en este momento, cree, que puede más que el TORO...

Es impactante verlo, es maravilloso ver a un fenómeno que nos despierte y que haga que nos suden las manos...

Pero el TORO es celoso y no se puede atropellar la razón...

Me faltas al respeto y te parto por la mitad...

Roca Rey, es un fenómeno, es un fuera de serie, sin duda, de lo mejor que ha surgido en muchos, muchos años...

Pero ojo, todo tiene un límite...

Ojalá me equivoque...

Fernando Lahoz...